Mircea Mazilu
Estimados docentes, a partir de este artículo de la sección de Metodología de nuestro blog hablaremos de los principales métodos que han predominado a lo largo de la historia de la enseñanza de idiomas. Esto nos permitirá comparar y reflexionar sobre las ventajas y desventajas de cada una de las “formas” de enseñar lenguas extranjeras del pasado y el presente. Empezaremos por el Método Gramática-Traducción, el primero de los métodos más famosos en la época contemporánea (siglo XIX-presente).
El Método Gramática-Traducción, igualmente conocido como Método Tradicional o Método Peusiano, fue el más usado en el mundo de la enseñanza de idiomas a lo largo del siglo XIX y principios del XX.
Como su nombre indica, este método priorizaba el análisis de la gramática y la traducción de textos como medio para enseñar y aprender un idioma extranjero.
Además, para los defensores de este método era importante la memorización de listas de vocabulario y la lectura de los principales autores que habían escrito en el idioma meta.
De la misma forma, este método apostaba por un alto nivel de excelencia a la hora de traducir textos, por lo que la corrección de los errores era una práctica indispensable en el aula.
Asimismo, otra de las principales características de este método era el uso de la lengua materna del estudiante en el proceso de enseñanza y aprendizaje.
Por otro lado, el Método Gramática-Traducción daba poca o ninguna importancia a la interacción y las habilidades orales, por lo que los alumnos no eran capaces de comunicarse en el idioma meta.
Además, el aprendizaje no se basaba en situaciones reales y significativas para los estudiantes, lo que, para muchos teóricos, lo convertía en un método poco motivador y poco funcional.
El Método Gramática-Traducción, el cual dominó el mundo de la enseñanza de idiomas durante el siglo XIX y principios del XX, en realidad era el mismo método que se había usado a lo largo de la historia para la enseñanza y el aprendizaje del latín y el griego clásico.
Por último, cabe mencionar que, aunque para muchos se trata de un método anticuado y poco eficaz, el Método Gramática-Traducción sigue teniendo todavía bastante aceptación a lo largo del mundo. Si bien no se implementa de la misma forma que hace siglos, varias de sus características siguen formando parte hoy en día del portafolio docente.